QUESOS 100%
NATURALES

LAS CABRAS
Detrás de cada uno de nuestros quesos hay cabras criadas en un ambiente limpio y confortable, con espacio suficiente para moverse, camas secas, ventilación adecuada y acceso a pasto fresco. La ordeña se realiza con prácticas que cuidan la ubre y evitan el estrés, porque una cabra bien cuidada produce una leche más pura. Así logramos quesos que no solo son deliciosos, también reflejan un compromiso real con la producción responsable.

La leche de nuestras cabras es ligera, cremosa y llena de nutrientes, fácil de digerir y con un sabor fresco que conquista inmediatamente.


Para que la leche se transforme en un queso de calidad, requiere de buen manejo de los animales e higiene en la ordeña. Cabras bien alimentadas, cuidadas con cariño, y una ordeña impecable garantizan que la leche conserve su pureza, su sabor y todas sus propiedades. Sí, la higiene es más sexy de lo que suena cuando hablamos de un buen queso.


Esa leche es la que le da personalidad al queso: ya sea fresco o maduro, suave o con carácter, con un puntito ácido que lo hace inolvidable. Cada bocado combina placer, nutrición y oficio, desde el cuidado de los animales hasta el queso que disfrutas en tu casa.


El queso es el resultado, pero la leche es la estrella.

LA LECHE

FERMENTACIÓN

La fermentación de nuestros quesos es una verdadera alquimia que transforma la leche en un alimento nutritivo, cremoso y fácil de digerir. Gracias a cabras sanas, bien alimentadas y manejadas sin estrés, la leche fermenta de manera óptima, y durante la maduración los cultivos lácticos siguen trabajando, enriqueciendo el sabor y preservando los nutrientes. Cada bocado es el resultado de esta transformación natural, un queso que combina salud, sabor y tranquilidad para el consumidor.

LOS QUESOS